Obedecer… Los libros escritos que nos revelan a un Dios Santo y Justo son para gente de avanzada, pues los necios y sabiondos en su propia opinión van de un lado a otro sin entender al no reconocer su gran necesidad espiritual. Existen leyes eternas que gobiernan este mundo y son como puertas que nos conducen a esos tesoros escondidos y eternos. Podremos tener gran conocimiento, pero sin Sabiduría no podremos aprovechar bien lo aprendido.
Te alabo,
Padre... porque escondiste estas cosas de los sabios y de los entendidos y las
revelaste a tus pequeños, Mateo 11:25-30
